viernes, 5 de septiembre de 2014

De linajes, certificados y cinturones.

Esta publicación se trata de una reflexión bastante personal con respecto a la importancia que se le da especialmente en el mundo occidental a tener un certificado, pertenecer a un linaje y tener el famoso "cinturón negro"

Una vez leí una publicación de un maestro de Wushu, en el que él daba su opinión sobre el tema que ya he mencionado, y a partir de ahí luego de discutirlo con compañeros de práctica y fui labrando mi propio criterio, que aunque difiere sólo en ciertos aspectos con el ya publicado, sigue siendo válido. 

Primeramente, les comparto la publicación original:

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"¿Cuánto ustedes creen que vale el linaje, certificados, cinturones, fotos con el maestro? CASI NADA.

El Wushu tradicional fue creado para matar (dicho en forma simple). ¿Acaso cuando me encuentro con un oponente que me quiere matar le voy a decir mi linaje o le voy a mostrar mis certificados para matarle de un susto?
Un gran maestro dijo: "No me digas quién es tu maestro ni me muestres tus certificados, tírate unos puños y sabré quién eres".
Que el maestro de uno tire rayos y vuele por el cielo no tiene nada que ver con uno, si uno es mediocre, sus movimientos hablarán solos.
Así que les pido que dejemos de decir eso de: "yo soy verdadero y él no, mi linaje es mejor, mis formas es más completa", y otras cosas parecidas. Si quieren, pongan un vídeo (vídeos públicos, no con cámara espía) para que la gente lo mire y lo juzguen por su cuenta.
Por último, no son pocos los casos de que alguien aprendido de "afuera" fuere mucho mejor que alguien de linaje directo. Sería mejor utilizar el tiempo para mejorar y no ser superado en vez de estar buscando quién tiene el linaje correcto, ¿no les parece?."

Jen-Cheng Chen.
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Bien, con respecto a lo que inicialmente dice el maestro Jen-Cheng Chen tengo sentimientos encontrados. Explico:

Por una parte podría decir que los certificados y diplomas tienen mayor validez en el mundo actual que en antaño, ya que en aquellos días se podía demostrar que "mi wushu es bueno" a puño limpio, duelos a puerta cerrada y todas esas cosas que uno ve en las películas. El asunto está en que en la actualidad ya las cosas han cambiado; muchos sistemas se han conservado por tradición, pero ya desde hace un tiempo lo de los duelos entre escuelas, retos y demás ha ido decayendo; claramente la sociedad ha ido evolucionando y tanto los intereses como las prioridades se han ido organizando.


Por otra parte, es difícil ganarle la carrera a la tecnología, así que ya esas nombradas "técnicas secretas" ya difícilmente se mantienen así. Para nadie es novedad la cantidad de material que se consigue hoy en día en lugares como YouTube, Youku, Vimeo e infinidad de sitios web, eso sin contar las herramientas de una época anterior, como lo era el Super 8, el Betamax o el VHS . Todo esto "le prendió el bombillo" a muchos "practicantes" que antes de dedicarle tiempo a entrenar bajo la tutela de alguien calificado, prefirieron colocarse un parche en el ojo, un lorito en el hombro y convertir a las herramientas multimedia en sus grandes maestros, autoproclamándose "maestro, gran maestro, sifu".



Hoy en día, estos "maestros" hechos en casa abundan en todo lo amplio del planeta; ocultando su "piratería" detrás de unos certificados y diplomas, afiliados a organizaciones ficticias y engañando a cuanto "inocente" ven por ahí.


La parte triste del asunto es que cuando alguien que realmente se toma la molestia de dedicarle tiempo a un entrenamiento serio (bajo la tutela de un instructor calificado, con un conocimiento de lo que sucede) los encara, estos maestros caseros evaden las preguntas y nuevamente se escudan tras sus certificaciones "online".

A mi parecer, quizás debiéramos retroceder un poco en el tiempo y volver a esas épocas en las que uno demostraba cuánto valía lo que uno sabía a puño limpio, pues así quedaban resueltas las dudas de si realmente eras lo que decías ser, y así rendías honor a tu maestro, tu estilo y tu escuela.



Ojo, no con esto quiero decir que todos los alumnos (o discípulos en su caso) que pertenezcan a un linaje X de un estilo Y sean todos excelentes, como en todo, están los alumnos buenos, los alumnos malos y los que consiguen un título pirata "por debajo de la mesa"


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